Ir al contenido principal

¿Cuánto cuesta el procés del procés?

¿Cuánto nos cuesta el procés del procés? Jueces de alto nivel y altos sueldos, fiscales, abogados del Estado, secretarios, ujieres, policías, funcionarios de prisiones, prisiones, transportes, y muchos otros gastos que no quiero ni imaginar. Que doce dirigentes catalanes hayan (presuntamente) incurrido en rebelión, o sedición, nos cuesta a los contribuyentes millones de euros, que, valga el tópico, darían más fruto en áreas como alimentación, vivienda, sanidad o educación.

Pero lo más caro de este juicio no es necesariamente lo económico. Su marcada teatralidad parece servir para difundir la causa independentista dentro y fuera de nuestras fronteras, para cuestionar la justicia española, y animar a que los tribunales europeos la sigan humillando.

Imaginemos que, al concluir, los encausados recibieran las condenas que probablemente merezcan. ¿Las cumplirán, o acaso un magnánimo gobierno abierto al diálogo les acabará indultando? Incluso en este supuesto, la condena merecida no habrá hecho sino alimentar el aura de mártires de la República Catalana de los encausados, lo que lo que a su vez llevará a que aumente el 50% de pro independentistas, y que en un futuro no lejano su crecimiento no pueda ser contenido por un gobierno dialogante.

Difícil problema el catalán. Para unos, la solución pasa por más 155, para otros por más diálogo, aunque algunos interlocutores sean sordos. A veces tengo la impresión de que, por muy mal que estuviera, aún se empeoró más tras junio de 2018. ¿Me equivocaré? Por el momento, entretengámonos con el proceso del proceso, y con la constatación de que la justicia puede ser muy cara. Y muy inútil.
Una fachada de un edificio de Barcelona 


Comentarios

Entradas populares de este blog

El silencio de Franz Jalics (1927-2021)

Hace unos días falleció un autor que me ha dejado huella; se trata de Franz Jalics (1927 -2021), jesuita y místico húngaro, impulsor de la meditación contemplativa como un camino de buscar a Dios no tanto a través del raciocinio o de la acción, o siquiera del sentimiento, sino a través de la percepción. Su obra más representativa, donde expone este sugerente camino con extraordinaria pedagogía, es Ejercicios de contemplación , un libro para leer en pequeñas dosis. De joven Jalics sirvió en el ejército húngaro durante la Segunda Guerra Mundial y allí, según expone en el citado libro, experimentó las primeras llamadas a poner su vida en manos de la Presencia que le susurraba que seguía estando allí a pesar del tremebundo y deprimente galimatías en que se había convertido la Historia contemporánea. Años después, ya jesuita, fue destinado a Buenos Aires, donde trabajó entre la población desfavorecida del Bajo Flores. Allí, en 1976, fue secuestrado por la dictadura argentina junto con otro ...

Tres años

Hoy se  cumplen tres años del día más horrible de mi vida (hasta la fecha). El tiempo sin duda cierra heridas, pero la cicatriz permanecerá siempre. Es un tópico porque es verdad. Si mantengo el inveterado principio de que escribo poesía inspirado por el dolor del alma, supongo que acabaré componiendo un poemario sobre ella. Pero si también mantengo el parsimonioso cuentagotas con que dosifico mi poesía, no puedo asegurar cuándo. Ahora voy terminando uno sobre una experiencia acaecida en 2017, para que os hagáis una idea... Este poema formará parte (D.m.) del eventual poemario, así que os lo adelanto. Aunque no es reciente, como algunos pocos sabéis. Cada noche cruje un poco nuestra cama. Tengo mucho más espacio, estirarme empieza a ser ya rutina. Soy el amo y el señor de mis dominios colchoneros (parvo imperio). A veces, solo a veces, duermo hondo y apenas me atormenta tu silencio.   Pero juro que hoy el alma empeñaría por volver a los dos quintos retroactivos de mi lado de t...

Cuentos en la escuela del futuro

A propósito de mi entrada de la semana pasada , no puedo reprimir el impulso de reproducir el principio de la escena de Solo yo me salvo  en la que el anciano Malaquías Winkle, quien ha vivido recluido en las últimas décadas de un futuro no muy lejano, visita una escuela. NOTA: Puede haber alguna expresión lingüística que el hablante de castellano de 2019 aún no domina. Se ruega, pues, paciencia.           —A tent@s a lo que viene. Caperucita Progresista se acercaba a casa de su abuelita, una ciudadana cronoavanzada pero en pleno dominio de sus facultades y consciente de sus derechos y obligaciones como ciudadana de una república tolerante, cuando se le acercó el lobo interesándose por los contenidos de su multitáper. Su pregunta no podía en absoluto ser catalogada como indebida ingerencia en las opciones libres de adquisición, sino más bien justificada por la indigencia de un animal marginal infraalimentado, inse...