Una de las noticias que ha calentado el final del verano en mi ciudad (Logroño) es la polémica por la prohibición de llevar las cabezas cubiertas en algunos institutos de secundaria, algo que afecta por igual a las gorras de rapero, a los siniestros hoodies , y a los velos islámicos, si bien la atención ha recaído más en estos últimos. Una alumna del I.B. Sagasta ha visto peligrar su permanencia en el instituto si no acataba la norma, y esto ha provocado diversas reacciones. Entre ellas, pocos días después de publicarse la noticia se congregó un puñado de compañeros solidarios durante el segundo recreo para manifestarse contra la medida en nombre de las libertades. El portavoz estudiantil, miembro del Consejo Escolar, leyó en un comunicado: “consideramos que es una medida que atenta contra los derechos fundamentales a la educación y a la expresión religiosa”. Es encomiable que los compañeros de la chica den la cara por ella, con o sin el apoyo de los dos diputados regionales de IU q...
Hoy se cumplen tres años del día más horrible de mi vida (hasta la fecha). El tiempo sin duda cierra heridas, pero la cicatriz permanecerá siempre. Es un tópico porque es verdad. Si mantengo el inveterado principio de que escribo poesía inspirado por el dolor del alma, supongo que acabaré componiendo un poemario sobre ella. Pero si también mantengo el parsimonioso cuentagotas con que dosifico mi poesía, no puedo asegurar cuándo. Ahora voy terminando uno sobre una experiencia acaecida en 2017, para que os hagáis una idea... Este poema formará parte (D.m.) del eventual poemario, así que os lo adelanto. Aunque no es reciente, como algunos pocos sabéis. Cada noche cruje un poco nuestra cama. Tengo mucho más espacio, estirarme empieza a ser ya rutina. Soy el amo y el señor de mis dominios colchoneros (parvo imperio). A veces, solo a veces, duermo hondo y apenas me atormenta tu silencio. Pero juro que hoy el alma empeñaría por volver a los dos quintos retroactivos de mi lado de t...