El fin de semana del 4 al 6 de abril tuvo lugar en Logroño y en San Millán de la Cogolla el II Encuentro de Editoriales Independientes, organizado por la Universidad de La Rioja, que tuve el gusto de dirigir. Numerosas editoriales con sólida presencia en el panorama español e hispanoamericano asistieron a los diferentes actos junto con el resto de participantes del tejido literario (autores, críticos literarios, profesores, estudiantes, etc.).
El programa del encuentro se dividió en cuatro mesas redondas, en las que se debatieron temas como la distribución, la publicación de poesía, el papel del lector o la crítica literaria; cinco paneles, en los que editoriales y autores publicados presentaron sus novedades y tres pitch, que dieron la oportunidad a diferentes escritores de presentar proyectos inéditos en busca de casa editorial. Además, se dedicó un espacio en el programa para la revista literaria Fábula, que cuenta con casi 30 años de recorrido en el sector. Por último, en una última jornada más distendida, los asistentes pudieron disfrutar de un recorrido guiado por el monasterio de Yuso, en San Millán de la Cogolla.
![]() |
Panel 1: La Huerta Grande |
El viernes 4 de abril el curso comenzó con el primer panel dedicado a novedades editoriales. La editorial La Huerta Grande (Phil Camino y Patricia Romero) recalcó el trabajo en la sombra, la labor del editor en la publicación literaria. Presentaron su línea editorial, enfatizando su catálogo de más de diez años y sus autores “reincidentes”, entre los que destaca Juan Carlos Chirinos. El autor venezolano, galardonado con varios premios nacionales e internacionales, ha presentado El informe sobre Clara, una precuela de su exitosa novela Nochebosque.
![]() |
Mesa redonda 1: la distribución |
El encuentro prosiguió con la primera mesa redonda sobre el reto de la distribución de los libros, en la que participaron diversos sectores implicados, desde la editorial (Patricia Romero, de La Huerta Grande) hasta la librería (Javier Sádaba, de Librería Cerezo), pasando por la distribuidora (Yolanda Porcar, de UDL Libros). Ente otros muchos temas, los participantes debatieron sobre la necesidad de formar a los agentes de la cadena de distribución desde la elaboración del libro hasta que llega a manos del lector; la excesiva caducidad de lo que se considera novedad en el mercado, en torno a los tres meses; y la tirada mínima que debe tener una edición para empezar a ser rentable (según el sentir de varios intervinientes, a partir de los 200 ejemplares).
El
segundo panel de novedades editoriales estuvo a cargo de Adriana Bañares, de la
editorial Aloha!, y Abelardo Linares, de Renacimiento. Linares hizo un amplio
repaso por la historia de la edición literaria y la creación de las librerías,
resaltando el papel fundamental del periodismo, los quioscos o incluso la luz
eléctrica. Adriana Bañares explicó la trayectoria de Aloha!, que publica
novela, relatos, novela ilustrada, cómic y fotografía. A continuación,
Guillermo Moracia, autor de la editorial, presentó Tránsitos, obra con la que consolida su incursión en la literatura
juvenil. Por su parte, Pilar Vega presentó su poemario Caleidoscopio, deleitando al público asistente con la lectura de
varios de sus poemas.
![]() |
Panel 2: Pre-Textos, De Conatus y Lastarria y De Mora |
Beatriz
González, al igual que Borrás, señaló la importancia del catálogo sólido en De
Conatus, y la importancia de publicar historias que no solo “cuenten cosas”,
sino que hagan reflexionar al lector. Subrayó, además, la difícil labor de los
editores como rastreadores de obras y autores de calidad y lo fortuito de que,
a pesar de su calidad, estos tengan un gran éxito o queden en segundo plano. Recordó
cómo su editorial descubrió en España al que posteriormente sería premio nobel
Jon Fosse, y también a Perceval Everett (National Award 2024).
![]() |
Mesa redonda 2: publicar poesía |
Posteriormente, en la mesa redonda “Publicar poesía, hoy”, moderada por María José Jiménez, poeta y catedrática, participaron Carlos Aganzo, escritor y crítico literario, Abelardo Linares (Renacimiento), y Rocío Arana, poeta y profesora. En ella se planteó el problema de la desaparición de diferentes espacios que antes ocupaba la poesía: revistas literarias, suplementos culturales, etc. Carlos Aganzo detectó que actualmente hay una confusión de criterios entre lo que vende y la auténtica poesía, que para él se caracteriza por la musicalidad, la fidelidad a la palabra, y la presencia de un misterio, a lo que Abelardo Linares añadió el uso de un lenguaje de especial intensidad, una visión oblicua de la realidad, y una sabia administración de los propios defectos. Linares recalcó que debemos, como sociedad, formar lectores que no tengan miedo al esfuerzo intelectual.
![]() |
Panel 3: Vaso Roto y Pie de Página |
La jornada del sábado comenzó con María Fuentes, editora de Vaso Roto, Carlos Valdivia, editor de Pie de Página, y la poeta riojana Valle Mozas. Fuentes presentó un cuidado catálogo en el que el libro, además de un contenido de exquisita calidad, se convierte también en un objeto con el que interactuar. Recordó que su editorial convoca un certamen de poesía joven y destacó la gran labor de los traductores en las editoriales, uno de los ejes imprescindibles del sistema. También habló de la labor de la literatura y, en concreto de la poesía, como sanación para los diferentes problemas de salud mental que experimenta hoy en día nuestra sociedad. Valdivia, por su parte, presentó las diferentes líneas de Pie de Página, editorial que se basa en la lengua en todas sus facetas: el ensayo, la narrativa y también, la poesía. Es en esta línea, llamada Maresía, donde la poeta Valle Mozas publicó El comienzo, su primer poemario. Valle explicó la génesis del proyecto y también los éxitos que ha cosechado desde su publicación, ya que además de un buen índice de ventas, ha conseguido ganar premios como el Ateneo Riojano.
Tras
el panel, Gregorio Clavijo, director de la revista Fábula, publicación
con una larga y consolidada trayectoria, la presentó ante los asistentes y resaltó el valor de la
resistencia de las revistas literarias en el panorama actual, dando importancia
también a la apertura de nuevos caminos, como la posibilidad de digitalización
de los contenidos, siempre que no se pierdan las tiradas en papel.
![]() |
Mesa redonda 3: la lectura |
Posteriormente, Joseluís González, profesor del Máster de Escritura de la UR, moderó la mesa redonda “El lector como crítico literario: la lectura, por encima de todo”, en la que Mercedes Monmany, escritora y crítica literaria, Eduardo Ruiz Sosa, escritor y editor de Candaya, y Nuria Sierra, lectora profesional para editoriales, resaltaron la validez de la crítica por parte del lector formado, atento y sincero, que puede expresarse a través de distintos canales como blogs, o clubs de lectura. Mercedes Montmany insistió en la importancia de releer a los clásicos atemporales, y afirmó que “todo buen lector tiene dentro de sí un crítico exigente e infalible”. Ruiz Sosa destacó la importancia de “formar público literario”. En este sentido, considera clave la amplia labor de formación de lectores atentos y críticos que realizan los clubes de lectura, ya que sus participantes se transforman en una parte esencial del sustrato cultural. Por ello, contempla tanto la escritura y la lectura como trabajos colectivos.
![]() |
Panel 5: Candaya y Pepitas |
En el quinto panel de novedades editoriales participaron Olga Martínez Dasi junto con Eduardo Ruiz Sosa (Candaya), y Julián Lacalle (Pepitas de Calabaza) junto con Elvira Valgañón, autora y traductora riojana. Olga presentó su catálogo bajo la premisa “Publicamos los libros que consideramos que hacen el mundo mejor”; en Candaya consideran la edición como un acto de amor y amistad, y por eso arriesgan todo por los autores en los que creen. Publican obras principalmente de autores hispanoamericanos que pueden entremezclar géneros, ya que creen en la dimensión poética de la literatura, y consideran que los libros no solamente deben contar cosas, sino que las tienen que hacer vivir. Ruiz Sosa presentó su obra El libro de nuestras ausencias, en la que denuncia la violencia que se sufre en el noreste de México por parte de los narcos.
La
editorial riojana Pepitas de Calabaza expuso su trayectoria a lo largo de estos
veintisiete años, y recalcó que los libros de entonces todavía siguen vivos, ya
que se siguen vendiendo. Pepitas, además de centrarse en la crítica social a
través del ensayo, también ha apostado por la narrativa a lo largo de su
trayectoria con cuidadas ediciones como la de la obra literaria de Rafael
Azcona, y apuestan por voces narrativas como la de Elvira Valgañón, que
presentó Fidela, novela que nos traslada a los años 30 y narra la
historia de una finca y sus habitantes.
![]() |
Mesa redonda 6: la crítica literaria |
La última mesa redonda, titulada “El declive de los recensores: ¿el fin de la crítica literaria?”, estuvo moderada por Carlos Aganzo y compuesta por Santos Sanz Villanueva, crítico y catedrático de universidad y las editoras Silvia Bardelás y Olga Martínez Dasi. Carlos Aganzo afirmó que hay una crisis profunda en el periodismo cultural, que repercute en la falta de criterios cualitativos para seleccionar los libros que merece la pena destacar; Santos Sanz Villanueva subrayó la importancia de hacer de la crítica periodística un género informativo, de devolverle el espacio que se ha ido perdiendo con los años, y expresó que hay editoriales que intentan inmiscuirse indebidamente en la imparcialidad del crítico; Silvia Bardelás (De Conatus) destacó que la crítica periodística tiene su principal efecto en el sector de los libreros, y Olga Martínez Dasi (Candaya) se lamentó del escaso eco en los suplementos culturales que tiene el envío de ejemplares de promoción. Además, se manifestó el problema de comunicación que existe entre los medios y las editoriales, que reivindican un mayor espacio para las reseñas o críticas de las publicaciones de los sellos independientes.
A lo largo de estas jornadas, los diferentes participantes han expresado la necesidad de espacios de encuentro como el vivido durante este fin de semana en La Rioja, ya que suponen un lugar de encuentro, comunicación, grandes aprendizajes y creación de redes muy necesario en el sector de las editoriales independientes, ya que se enfrentan a diario con enormes retos en ocasiones, difíciles de superar. Una cita que Sanz Villanueva remató con humor diciendo que “ya hemos llorado a gusto”.
(Agradezco a Alicia Muro y a Raquel Martínez Soto la elaboración de unas notas que han posibilitado esta crónica)
Comentarios
Publicar un comentario