Otro de los poemas de Nada personal que marca el tono de la primera sección. A Bernardo Atxaga parece que le gustó, o al menos, me dijo que también era sobrino de tío Salva. TÍO SALVA, EXDIRECTOR DE BANCO En este mismo sofá descansaba el tío Salva, jubilado, mientras leía sus cuatro cotidianos diarios, las tres revistas de opinión y morbo, y degustaba su copazo o dos de Mágnum, tras lo cual se defecaba en el Caudillo y en todos los mangantes circundantes. En este mismo sofá Me conminaba a ser astuto, a trabajar de duro por mis sueños, a no regalar ni un ápice de aquello que hubiera conquistado. A conservar amigos, pero no darles todo, a no fiarme de la sombra propia, a arrojar alguna piedra sin destapar la mano, a ser culto, a ser fuerte, a no pasar la vida en vano. En este mismo sofá. Y ahora que le sacudo el viejo polvo que quizá cayera en esos días me pregunto si, pasado mucho tiempo, algún hijo, sobrino o quizá n...