En estos días unos 1600 jóvenes riojanos conocerán sus calificaciones en la primera convocatoria de la PAU, y empezarán a encaminar sus pasos hacia la siguiente etapa de sus estudios, la universitaria. Aunque las decisiones que ahora tomen podrán ser, por supuesto, revisables, sus opciones van a poner en marcha una cadena de causas y efectos que determinarán buena parte de su futuro. Les mando desde aquí mis mejores deseos de que tomen las decisiones correctas; y a quienes se presentan a la convocatoria de julio, mis ánimos para que la segunda sea la vencida. Una de las asignaturas de las que han tenido que examinarse la totalidad de los alumnos es Lengua Castellana y Literatura, una materia muy necesaria no solo para los que vivimos cerca de su cuna. En efecto, no todos vamos a utilizar de modo cotidiano los logaritmos neperianos, pero nuestra lengua materna es el vehículo habitual de comunicación en la vida diaria, por lo que una esmerada educación en sus estructuras nos permite expr...
El excelente reportaje del pasado martes, firmado por Nuria Alonso, [en el diario La Rioja ] sobre los gastos de las primeras comuniones en nuestra comunidad me da que pensar. Las agendas de restaurantes copadas hasta 2026, con presupuestos que oscilan entre 2.500 y 13.500 euros por banquete; un vestuario que va entre 280 y 700 € para el vestido de las niñas, y entre 224 y 450 € para el de los niños, a lo que hay que añadir los zapatos. A esto súmese también el reportaje fotográfico, la peluquería, detalles para los invitados, y, por supuesto, los regalos. Imagino que el balón de reglamento de mis tiempos (como se decía para distinguirlo de una simple pelota de goma) ha dado paso a iphones, patinetes eléctricos, o Nintendos Switch. Muchas son las familias que están dispuestas a tirar la casa por la ventana para celebrar el “día más feliz” en la vida de sus hijos, aquel en el que, tras unos años de preparación, por fin van a recibir a Jesús sacramentado. Un sacrificio que contrasta un p...