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Mostrando entradas de septiembre, 2017

DOS POEMAS BREVES

Esta semana ha sido de calma tras el paso del huracán , de ver cómo la vida sigue y el daño se empieza a reparar, salvo que haya sido irreparable. En la cabeza me rondan una serie de poemas provocados por la situación y por este viaje tan especial, pero aún no me atrevo a adelantar nada. Ya veremos si sé responder a la inspiración. A cambio, reproduzco dos de los poemas más cortos de Nada personal , que además de su parvedad tienen en común que tratan del viaje de la existencia. "Nada original", claro, pero la poesía no deriva su valor de la novedad de sus temas, ¿verdad? CHECK POINT Para el viaje decisivo ya no hay equipaje que valga; todo nos quedará confiscado en el registro aduanero.  SINO Y a fin de cuentas, a todos se nos va poniendo cara de muñecos de guiñol.    

EN EL OJO DEL HURACÁN

(Escrito hace dos días, pero he estado incomunicado hasta ahora) EN EL OJO DEL HURACÁN No me refiero a otro caso de persecución ideológica, como la semana pasada , sino, literalmente, al Huracán Irma, considerado el más peligroso que ha asolado Norteamérica en las últimas décadas. Por azares del destino me encuentro, mientras escribo estas líneas, en medio de la rugiente “hermana”, y quisiera compartir mi conciencia de vulnerabilidad con el puñado de lectores y voyeurs que me sigue.          Llegué a Miami el 1 de septiembre a ultimar el libro que tengo entre manos, y el lunes 4 empecé a oír hablar de la amenaza. Al principio me lo tomé a la ligera (ah, estos norteamericanos, tan tremendistas), pero el martes ya me quedó claro que no era moco de pavo. En estos días previos todos los telediarios se centraron en el inexorable avance del huracán caribeño más devastador que se recuerda, que llegaría a Florida el fin de semana. Una cadena se dedicó exclusivamente a seguir su ev

MUERTE AL DISIDENTE

En mi última entrada me preguntaba si había, tras cuarenta años de costosa democracia, verdadera libertad en España. Pues bien, en el mes de agosto he presenciado un triste caso que lo pone en duda. Se trata de un escritor de un lugar de la Mancha (prefiero no acordarme para no dar más pistas a descerebrados) que con cierta periodicidad escribe en su periódico local columnas de opinión. Nuestro hombre es inteligente y culto, pero, ay, adolece de un defecto imperdonable: es un irredento conservador.          Pocos días atrás, al hilo de los atentados catalanes, se le ocurrió escribir una columna muy crítica con el Islam, donde se lamentaba de que nuestras autoridades facilitaran cada vez más la penetración de lo islámico al tiempo que cortaban las alas a lo católico. La reacción de colectivos “libertarios” no se hizo esperar: Podemos y otros grupos de izquierda encabezaron una virulenta persecución por delitos de odio y pidieron la cabeza del “islamófobo”. El linchamiento de los